A 95 km al suroeste de la ciudad de Osh, al pie de la cordillera Alai se encuentra el valle Kozhekelen. Este pequeño lugar parado entre altas montañas, atrayente con sus paisajes llenos de misterios y maravillas.
Acantilados, hechos de enormes bloques de piedra, densos bosques de picea, praderas verdes – todas estas cosas embellecen y le permiten al alma descanzar en armonia con la naturaleza. Es hogar de tejones, jabalies y carneros salvajes. Yaks apacentandose en los prados. Kozhokelen esta rodeado por rocas rojas, donde puede tomar un caballo o ir a pie a una excursion.